EL MOSTRADOR DEBE SER EL PROTAGONISTA
El mostrador es la pieza clave de tu farmacia. El punto de paso obligado para todos los clientes que desean comprar. Por eso, es la ubicación perfecta para productos y artículos de compra impulsiva que permitan seducir al cliente en el último momento. Ten en cuenta que no solo debes exponerlos tácticamente y de forma ordenada sino también aprovechar el enclave para aumentar tus ventas.
Tan importante es el “arte” de saber exponer los productos como saber seleccionar los que los pacientes quieren y están buscando. Dar en el clavo y hacer que encuentren siempre lo que desean no es difícil, pero tampoco es algo que ocurra al azar o por intuición. La recomendación pasa por realizar un estudio de los hábitos de consumo de los clientes para identificar cuáles son sus necesidades, sus gustos, rutinas, edad, circunstancias…
“Los productos estacionales y las promociones se convierten en un gran reclamo para quienes visitan tu farmacia”
Ponte en los zapatos del cliente. Cuando ve un producto, piensa en si lo necesita o le va a resultar útil, pero también se pregunta cuál es su precio. El consejo es colocar siempre las etiquetas de los precios de forma visible y legible para facilitar y agilizar la compra.
Aprovecha todos los lineales, carteles y estantes que te proporcionan los laboratorios para dar visibilidad a sus productos. Así crearás una buena imagen de marca sobre el producto si está expuesto de una forma llamativa y, por ende, aumentarás las ventas. Una disposición atractiva de los productos en tu farmacia hará que llamen la atención de tus clientes y puedan aumentar sus ventas. Ten en cuenta que esta publicidad será gratuita y hará aumentar la visibilidad de muchos de tus productos.
ANALIZA EL ESPACIO DE TU FARMACIA
Tras identificar las necesidades de los clientes, se debe llevar a cabo otro estudio y no es otro que el de la propia farmacia. ¿Qué recorrido realizan los clientes que entran en ella? ¿Cuáles son las zonas calientes y frías, es decir de más y menos atracción para ellos? Prueba a poner productos de tus zonas frías en el mostrador para incrementar sus ventas.
Tras el análisis se puede probar a hacer variaciones y reubicar los productos de temporada o sujetos a promociones. Sin embargo, no es recomendable cambiar demasiado las ubicaciones de los productos para no despistar a los clientes. Elabora un calendario de productos clave y promociones para organizarte con antelación.
Ten siempre en tu mostrador productos estacionales, que tengan que ver con la época del año en la que estás. No tiene sentido que tengas en el mostrador una crema solar en pleno invierno, cuando la mayoría de tus clientes no van a utilizarla.